El tratamiento homeopático más adecuado es el remedio constitucional. Ese remedio puede ser diferente para cada persona. Un médico homeópata determinará cuál es en base a una historia clínica completa que tenga en cuenta la persona a nivel global (síntomas físicos, psicología, etc.). No obstante, para aliviar los síntomas puede utilizarse algunos de los medicamentos homeopáticos que se describen a continuación. Se utilizarán en una potencia 15 CH ó 30 CH, tomando tres gránulos cada 12 horas durante tres días, empezando 24 horas antes del momento en que esperas que aparezcan los síntomas.

Calcarea carbonica. Síndrome premenstrual con fatiga, ansiedad y una sensación de sentirse abrumada. Mujeres con retención de líquidos y tendencia a ganar peso, pechos dolorosos al tacto, problemas digestivos y dolores de cabeza. Las menstruaciones suelen presentarse demasiado pronto y duran más de lo normal. Sensación general de frialdad, con pies y manos fríos y húmedos. Deseo de dulces y huevos.

Bovista. Trastornos menstruales con hinchazón en las extremidades, retención de líquidos y sensación de estar hinchada. Se siente torpe y se le caen las cosas debido a la sensación de tener las manos hinchadas. La diarrea durante la menstruación suele ser un indicativo de la conveniencia de este medicamento.

Cimicifuga. Menstruaciones irregulares y dolorosas. Dolor punzante que se extiende por las caderas y muslos o dolores similares a los del parto que se sienten en la pelvis. Dolor de cabeza con dolor y rigidez del cuello durante el síndrome premenstrual. Mujeres que se vuelven muy habladoras, agitadas y deprimidas durante la menstruación.

Caulophyllum. Este medicamento es útil en mujeres con una historia de menstruaciones irregulares, problemas para quedarse embarazadas o parto lento debido a un tono muscular débil en el útero. Malestar durante la menstruación, descarga abundante de sangre o flujo vaginal. Dolor tirante en la región pélvica, muslos y piernas. Rigidez en las articulaciones o artritis, sobre todo en los dedos.

Chamomilla. Mujeres enfadadas, irritables e hipersensibles al dolor. El dolor menstrual aparece o se intensifica debido a factores emocionales. Flujo muy abundante, con sangre oscura o con coágulos. Los síntomas suelen empeorar por la noche. Los paños calientes o la exposición al viento pueden agravarla. El movimiento (como balancearse o caminar de manera enérgica) suelen aliviar los síntomas.

Lachesis. Mujeres intensas, con intenso deseo de desfogarse, tanto física como mentalmente. Los síntomas del síndrome premenstrual incluyen congestión, dolor de cabeza, rubor, sofocos y una irritabilidad intensa, a menudo con celos o suspicacia intensos. Cuando aparece la menstruación, el flujo es intenso, pero proporciona alivio de la tensión. La intolerancia a la ropa que presiona la cintura o cuello es un indicativo de lachesis.

Kreosotum. Dolor de cabeza, náuseas y flujo abundante que hace que los genitales y la piel cercana estén irritados e hinchados. Mujeres con síndrome premenstrual que se sienten irritables e incómodas y tienen una fuerte aversión al acto sexual.

Lycopodium. Síndrome premenstrual con deseo de dulces y apetito voraz (a veces una tendencia bulímica). Problemas digestivos con hinchazón abdominal y flatulencia. Suele sentirse peor por la tarde. Las menstruaciones pueden estar retrasadas, flujo menstrual intenso, suelen durar más de lo normal. Mujeres preocupadas, con falta de confianza, aunque se muestran irritables y dictatoriales con los miembros de la familia. Deseo de estar sola pero con alguien en otra habitación de la casa.

Lilium tigrinum. Mujeres inclinadas a la ira durante la menstruación, extremadamente irritables y sensibles. Presión en el recto y en la región pélvica, con sensación de que el útero empuja hacia fuera, que la lleva a desear sentarse con frecuencia o cruzar las piernas. Las emociones y la excitación agravan los síntomas. Se siente mejor al aire libre.

Natrum muriatucum. Personas muy sensibles y reservadas. Puede sentirse muy sola y triste pero le molesta que otros traten de consolarla o compadecerse de ella. Depresión, ira por nimiedades, necesidad de estar sola para llorar. Los problemas menstruales pueden estar acompañados de migrañas o un dolor de espalda que mejora al tumbarse sobre una superficie dura o empujando un objeto sólido contra la parte dolorida. Deseo de sal, sed intensa y tendencia a sentirse peor por estar al sol.

Sepia. Mujeres que se sienten agotadas, desean que los demás se mantengan lejos (sobre todo los miembros de la familia). A menudo siente que no la toman en cuenta y que está saturada de trabajo, volviéndose irritable o sarcástica si se le exige algo. Menstruaciones retrasadas o escasas con una sensación de que el suelo de la pelvis es débil o como si el útero se hundiera. La humedad y la transpiración pueden agravar los síntomas. El calor y el ejercicio, sobre todo bailar, le aportan cierta energía y mejoran su estado de ánimo.

Pulsatilla. Es un remedio útil en muchos trastornos que implican cambios hormonales y en chicas que acaban de empezar a menstruar. Síndrome premenstrual con irritabilidad, mal humor y ganas de llorar. Retraso o supresión del flujo menstrual acompañado de sensación de náuseas y mareos. El calor y las habitaciones mal ventiladas empeoran los síntomas. Se siente mejor al aire libre. La duración, cantidad y naturaleza de las menstruaciones son variables, así como lo es su estado de ánimo. Suelen ser mujeres sensibles y necesitadas, que reclaman mucha atención y afecto.

Veratrum album. Menstruaciones con un flujo muy abundante y dolor, con una sensación de agotamiento y frío. Los vómitos y diarreas son frecuentes. Las menstruaciones pueden empezar muy pronto y prolongarse demasiado. Se siente peor por la noche, al hacer ejercicio y al beber bebidas calientes. Suele mejorar con las bebidas frías, comidas escasas y abrigándose.

Nux vomica. Mujeres extremadamente impacientes, intolerantes, competitivas. Menstruaciones irregulares, con necesidad urgente de defecar antes de que comience el flujo menstrual. Estreñimiento, dolores constrictivos que se extienden al recto o al coxis. Ira, tensión mental, esfuerzo físico excesivo, exceso de alcohol y café o excesos en las comidas pueden agravar los síntomas. A menudo siente frialdad y mejora con el calor y el descanso.